La lluvia suspende todas las procesiones del Viernes Santo en Toledo
La persistente lluvia que cayó sobre Toledo durante la jornada de ayer, Viernes Santo, obligó a la suspensión de todas las procesiones previstas en el día central de la Semana Santa de la capital castellanomanchega. Ninguna de las cofradías pudo realizar su estación de penitencia, impidiendo además el estreno del nuevo horario planificado para este día. El Viernes Santo Toledo quedó así sin desfiles procesionales en las calles.
La ciudad de Toledo vivió ayer, Viernes Santo, una jornada atípica y marcada por las condiciones meteorológicas adversas. La lluvia constante forzó la cancelación de todos los desfiles procesionales programados, dejando en blanco el que es considerado el día grande de la Semana Santa toledana, declarada de Interés Turístico Internacional.
En la iglesia de Santa Leocadia, la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia y María Santísima de la Caridad tomó la difícil decisión de no realizar su estación de penitencia a las 20:00 horas. Esta confirmación llegó tras una breve prórroga sobre la hora inicialmente prevista (19:15 h), anunciada por el hermano mayor con la esperanza de una mejoría que no llegó. A pesar de que la inestabilidad meteorológica hacía prever este desenlace, la noticia fue recibida con evidente tristeza y resignación por los numerosos cofrades y fieles que aguardaban a las puertas del templo.
Como gesto hacia los presentes, la Hermandad abrió las puertas de Santa Leocadia para mostrar brevemente la cruz de guía, los estandartes y las andas con sus imágenes titulares. Este año estaba previsto que ambas imágenes procesionaran juntas por primera vez, en una nueva disposición sobre el paso que había sido valorada positivamente por los hermanos. La viabilidad de esta nueva composición, con el Cristo en el centro y la Virgen ligeramente girada a su derecha, pudo comprobarse al deslizar el paso con ruedas por la puerta del templo. Tras este simbólico saludo, las imágenes regresaron al interior acompañadas por las interpretaciones de la Banda de Cornetas y Tambores Virgen del Rocío (de la Cofradía Hermandad de la Virgen del Rocío de Toledo) y la Unión Musical Benquerencia, que tocaron «Ciudad Sagrada», la nueva marcha dedicada a la Junta de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Toledo.
La iglesia de Santa Justa y Rufina, considerada el centro neurálgico del Viernes Santo Toledo al ser punto de partida y encuentro de las hermandades del Santísimo Cristo del Descendimiento, Nuestra Señora de las Angustias, el Santo Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad, también vio cómo sus procesiones quedaban suspendidas. La decisión se comunicó en el interior del templo, contando con la presencia del arzobispo de Toledo, Monseñor Francisco Cerro Chaves. Como alternativa, se procedió al rezo del Vía Crucis. Algunos de los pasos fueron mecidos por los cofrades ante los fieles congregados, aunque el acceso al templo se vio limitado por razones de seguridad y aforo.
Esta cancelación generalizada tuvo como consecuencia adicional que no pudiera implementarse por primera vez el nuevo y polémico horario que las hermandades habían acordado tras meses de trabajo conjunto para la jornada del Viernes Santo. Su aplicación práctica y evaluación deberá esperar, como mínimo, a la Semana Santa del año 2026.
Aunque las calles de Toledo se quedaron sin los pasos procesionales en uno de los días más esperados, la jornada estuvo marcada por numerosos gestos de fe, recogimiento y respeto en el interior de los templos. Las hermandades y los fieles toledanos demostraron su compromiso y devoción a pesar de las inclemencias meteorológicas, adaptándose a las circunstancias con entereza. Las cofradías y devotos ya miran con esperanza al Viernes Santo Toledo del próximo año, confiando en poder celebrar sus tradiciones con normalidad.