El padrón municipal de Toledo alcanza en 2025 los 88.356 habitantes, lo que supone un incremento de 1.616 personas con respecto al año anterior, según ha aprobado la Junta de Gobierno Local en su sesión extraordinaria celebrada la pasada semana.
El crecimiento poblacional se refleja en la práctica totalidad de los barrios de la ciudad, consolidando una tendencia al alza en el número de vecinos empadronados.
Barrios con mayor crecimiento
Entre los barrios con mayor aumento destaca Santa María de Benquerencia, que suma 553 nuevos residentes, seguido de Santa Bárbara, con 486 habitantes más, y el Casco Histórico, que incrementa su población en 265 personas. Estos tres barrios concentran cerca del 80 por ciento del crecimiento total del padrón por zonas. A continuación se sitúan Azucaica, con 222 nuevos vecinos, y el conjunto formado por Valparaíso, La Legua y Cigarrales de Vistahermosa, que registra el mismo incremento.
Otros barrios que también experimentan subidas, aunque más moderadas, son Cigarrales–Cerro de los Palos, con 44 habitantes más; Tres Culturas, con un aumento de 42; y Vega Baja, San Pedro el Verde y Circo Romano, que crecen en 33 residentes. Asimismo, se registran incrementos en Santa Teresa–avenida de la Reconquista, Antequeruela-Covachuelas, San Antón–avenida de Europa y la zona industrial de Santa María de Benquerencia.
Cuatro barrios pierden población
Por el contrario, cuatro barrios pierden población. El descenso más acusado se produce en Palomarejos, con 167 habitantes menos, seguido de Buenavista, que reduce su padrón en 136 personas. También se registran leves descensos en La Bastida, San Bernardo, Montesión y Olivar Pozo, así como en San Martín.
En la misma sesión extraordinaria, la Junta de Gobierno Local aprobó, en el área de Servicios Sociales, Educación y Familia, las normas reguladoras y la convocatoria del XXII Concurso de Narrativa Femenina ‘Princesa Galiana 2025’.
El Ayuntamiento de Toledo ha introducido en esta edición una revisión del certamen con el objetivo de reforzar su sentido fundacional y consolidarlo como un premio de prestigio dentro del panorama literario.
La modificación busca otorgar un valor cultural y económico adecuado a la obra premiada, entendiendo la literatura como un elemento esencial de creación artística, pensamiento crítico y transmisión de conocimiento.
El certamen contará con un Primer Premio, que incluirá la publicación de la novela ganadora mediante contrato de edición, y un Accésit Mujer Novel, ambos acompañados de diploma conmemorativo.
