Balance negativo para IU de este gobierno de PP y Vox “convertido en una empresa constructora”
El portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, ha hecho un balance negativo de los dos primeros años de legislatura del Gobierno local de PP y VOX.
Un gobierno al que ha acusado de actuar como “una empresa constructora” centrada en “un sinfín de proyectos de alquitrán y ladrillo”, mientras se desatienden políticas dirigidas a transformar la vida de la ciudadanía.
Sin avances en sostenibilidad, movilidad o mejora de los servicios públicos
Fernández ha señalado que la ciudad está recibiendo “decenas de millones de euros” que, en su opinión, no se están aprovechando para avanzar en sostenibilidad, movilidad o mejora de los servicios públicos.
“Esta está siendo la legislatura del puedo y no quiero”, ha afirmado, apuntando a la falta de iniciativas como la puesta en marcha de un servicio municipal de comida a domicilio, una mesa de Salud Mental o la declaración de Toledo como zona tensionada para facilitar el acceso a la vivienda.
Críticas al papel de Vox
El edil de Izquierda Unida también ha criticado el papel de VOX en el equipo de Gobierno, asegurando que sus políticas responden a “un eje fascista alineado con Le Pen, Trump, Orbán o Meloni”, algo que, según ha dicho, se traduce en decisiones como impedir que se declare a Israel estado genocida, reducir los fondos de cooperación internacional, eliminar la Concejalía de Igualdad o vetar la colocación de la bandera en defensa de los derechos del colectivo LGTBI.
“Desde que VOX está en el Ayuntamiento, estos derechos humanos no se muestran, se esconden”, ha lamentado.
Txema Fernández ha denunciado también la falta de compromiso con la memoria democrática, al asegurar que en estos dos años “no se ha destinado ni un céntimo de euro” a su cumplimiento, pese a ser una ley vigente, mientras “se han empeñado en sacar a los reyes godos de la catedral”.
Sin proyecto de ciudad sólido y duradero
A su juicio, el Gobierno local carece de un proyecto de ciudad sólido y duradero, centrando los debates municipales en infraestructuras como pabellones, puentes o teleféricos, mientras se aplazan transformaciones de fondo.
Fernández ha insistido en que los fondos europeos que está recibiendo el Ayuntamiento deberían destinarse a medidas de reutilización, reciclaje y sostenibilidad, y no solo a proyectos de obra. “Estos fondos tenían que servir para recuperar, resistir y transformar la ciudad, no solo físicamente, también en su modelo de futuro”, ha manifestado.