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    El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Toledo ha solicitado que la ciudad rinda un homenaje institucional a José Ballester Gozalvo, primer alcalde de la capital regional durante la Segunda República y único regidor toledano fallecido en el exilio.

    La propuesta incluye también la presencia de una representación oficial del Consistorio en el acto de repatriación de sus restos, que tendrá lugar el próximo 6 de septiembre en El Cabanyal, Valencia.

    Deuda moral con quien defendió la democracia

    El concejal socialista Pedro Jesús López ha defendido que “Toledo tiene una deuda moral con quien defendió la democracia y la justicia social desde el compromiso y la educación”, y ha calificado esta propuesta como “un acto de justicia institucional y memoria democrática”.

    José Ballester, nacido en Valencia en 1893, fue elegido alcalde de Toledo el 14 de abril de 1931, coincidiendo con la proclamación de la Segunda República, y poco después, diputado en las Cortes Constituyentes. Participó en la redacción de la Constitución republicana de 1931 y desempeñó cargos como director general de Primera Enseñanza, miembro de las Misiones Pedagógicas y de la junta directiva del Ateneo de Madrid.

    Tras la Guerra Civil, se exilió en Francia, donde mantuvo su compromiso político como presidente de la Liga de los Derechos del Hombre y colaborador del Gobierno republicano. Falleció en 1970 en la localidad francesa de Villiers-Adam. Sus restos, junto a los de su esposa Teresa Molins, serán trasladados a su ciudad natal gracias a una iniciativa del Levante UD —club que fundó en 1909— con el apoyo de la Diputación de Valencia.

    Una historia que no puede quedar olvidada

    López ha recordado que en los últimos años su figura ha sido objeto de recuperación institucional y cultural, como en la exposición “De ranas, gatos y palmeras”, organizada por el Museo Valenciano de Etnología, que incluyó objetos y documentos personales conservados por el Ayuntamiento de Toledo.

    “Su historia no puede quedar olvidada”, ha recalcado el edil socialista. “Ballester representa lo mejor de una generación que luchó por los valores que hoy compartimos. No se trata de un gesto simbólico, sino de un acto de dignidad democrática”.

    Desde el Grupo Socialista se insiste en la necesidad de que Toledo esté presente en la repatriación de sus restos y que, además, se organice un homenaje público en la ciudad como reconocimiento a su legado político, educativo y humano.

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