El Teatro de Rojas presenta con “El Nadador de aguas abiertas” un ambicioso ciclo contemporáneo
El Teatro de Rojas presenta con “El Nadador de aguas abiertas” un ambicioso ciclo contemporáneo. Esta obra es un regalo para la reflexión sobre la amistad y la vida a través del mar.
El ciclo de obras contemporáneas más ambicioso del Teatro de Rojas
El próximo día 24 de febrero se presenta en el Teatro de Rojas, “El Nadador de aguas abiertas”, del director Fernando Bernués con Marcos Marín, y Adolfo Fernández como actores de la obra.
Es una obra que inicia su andadura en el teatro de Rojas como punto de partida y estreno nacional y forma parte del ciclo de obras contemporáneas más ambicioso de todos los años en Toledo.
Esta obra traslada dos vidas convergentes gracias al mar donde se ponen de manifiesto valores como la reflexión, la amistad o el compartir retos una historia de como el mar une a las personas y sus vidas a través incluso de los grandes problemas de los personajes.
Nilo, un actor mediocre y sin papel, separado de su mujer y en un momento de decadencia conoce a Walrus, un nadador profesional con un trauma familiar oculto, y con el que Nilo aprenderá a nadar a sus 48 años y en este proceso van a dar un vuelco a sus vidas recibiendo unas importantes lecciones para sus vidas a través de esa interacción y nueva amistad que surge entre ambos.
Llevar el mar a un escenario teatral
Una obra con una impresionante puesta en escena, dada la complejidad que suponía la pregunta de ¿cómo traer el mar a un escenario teatral?, y unos grandes diálogos por la reflexión a la que invita la obra.
El director, Fernando Bernués matizaba “el inmenso placer de poder presentar este espectáculo, en su estreno aquí en Toledo”
Es una adaptación de un relato para adultos que cuenta la amistad de dos personas entabladas a través de mar que de una faceta narrativa la hemos llevado a una adaptación dramática para el teatro.
Adolfo Fernández en el papel de Walrus, destacaba “que es un honor hacer el estreno en una ciudad como Toledo y un teatro como el Rojas. Al final la obra es una tragicomedia gracias a los dos personajes que son entrañables y que se necesitan entre ellos, lo cual genera una química y una dinámica que establece una continuidad en escena que luce mucho”.
Marcos Marín, en el papel de Nilo, nos habla de como el personaje encaja perfectamente dentro de su propia vida como actor, también de 48 años, y que además la profesión de los actores había sido zarandeada de forma importante por la pandemia, con lo cual la obra y su personaje son en cierta parte un espejo de su vida en el momento que le proponen el papel”.