Ana Abellán: «En la firma del Pacto por la Inclusión está representada prácticamente toda la sociedad toledana»

Ana Abellán, concejala delegada de Servicios Sociales, Igualdad, Mayores, Personas con Discapacidad y Familia en el ayuntamiento de Toledo

El pasado miércoles 2 de febrero tuvo lugar en el Centro Cultural San Marcos la firma del Pacto por la Inclusión de Toledo, promovido a instancias de la alcaldesa, Milagros Tolón, quien lo asumió como uno de los principales compromisos de esta legislatura y que terminaron rubricando un total de 81 entidades con la presencia del secretario de Estado de Migración, Jesús Javier Perea. Un motivo de satisfacción para todo el equipo de Gobierno, y especialmente para Ana Abellán, concejala delegada de Servicios Sociales de Toledo. Con ella hablamos para desgranar cómo va a afectar ese importante pacto a los toledanos y toledanas.

Trabajas en un área muy dura, porque se ven de primera mano muchos casos dramáticos, pero también debe ser muy emocionante cuando se cumplen hitos tan grandes como el Pacto por la Inclusión. ¿Cómo lo viviste?
El miércoles que se aprobó el Pacto por la Inclusión fue un día de mucha ilusión, no voy a negarlo, de emoción y muchos sentimientos. Ver ese Centro Cultural con todas las entidades apoyando, y no solo eso, sino mostrando su confianza hacia nosotros… ellas tienen una parte muy importante, todas las entidades desde el tercer sector, sociales, deportivas, colegios, era prácticamente toda la sociedad toledana, mayores, igualdad, violencia… no era un conjunto de personas, toda la sociedad estaba representada y para todo el equipo de gobierno, y quizás más para mí por ser mi área, era muy importante. El Pacto no solo va a afectar a Bienestar Social, una de las cosas que tuvo clara la alcaldesa era que tenía que ser transversal a todas las concejalías, porque si no, por mucho que haga una si el resto no acompaña, se queda colgada, y ocurre lo mismo en Igualdad, por ejemplo.

Sabiendo que te forzamos a sintetizar mucho, pero… ¿cómo le explicarías a un toledano o toledana qué es el Pacto por la Inclusión?
Llevarlo a cabo será más duro, pero es fácil explicarlo, es un pacto con el que todos nos comprometemos a que nadie se quede atrás, a que todo el mundo tenga su lugar en situaciones de vulnerabilidad. Y son muchos tipos, no es solo que se haya quedado sin trabajo, puede ser una discapacidad con problemas de accesibilidad, niños y niñas con déficit a la hora de hacer deporte… pues dar a todas esas personas una oportunidad, porque son sus derechos.

Que el secretario de Estado de Migración del Gobierno de España, Jesús Javier Perea, pusiera el acento durante la presentación del Pacto en lo local de la inclusión, evidencia la importancia de los Ayuntamientos en ayudar a las personas en situación vulnerable.
Somos la puerta más cercana, somos la institución que más contacto tiene con la ciudadanía en el día a día. El gobierno de España también tiene unos objetivos en cuanto a bienestar general, pero al final es la alcaldesa quien está todos los días en la calle viendo a los ciudadanos de tú a tú.

Hay voces de hecho que reclaman una reforma de la ley por la que se rigen sus competencias para dotarse de más recursos. ¿Cómo ve el gobierno de Tolón el futuro de los Ayuntamientos a ese respecto?
Tener una alcaldesa que también es vicepresidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) puede ayudar mucho a abrir esas puertas. Muchos de los objetivos de los ayuntamientos no dependen solo de su nivel, sino que implican a otras administraciones, y quizás por eso sí debería ser mayor su financiación, y tener más facilidades a la hora de llevar a cabo esas políticas sin depender tanto de otras instituciones.

Dejasteis claro durante el acto y en esta entrevista que afecta a todas las áreas de Gobierno como estrategia transversal. ¿Cómo vais a desarrollarlo, desde tu área se lanzarán directrices, o en Junta de Gobierno?
El Pacto va a trabajar con mesas de empleo, educación, salud, accesibilidad, juventud, deportes, cultura e igualdad, y en esas mesas además de las entidades que vayan a participar, según su área estarán los técnicos, para que así entre todo el mundo podamos sacar adelante los objetivos y que este pacto no se quede en una firma de un día.

El día de la presentación del mismo planteaste acciones dirigidas a favorecer la participación activa y el acceso al marco de derechos fundamentales. Hicisteis mucho hincapié en ello.
Está abierto a todo el mundo, aunque casi siempre será a través de una entidad porque son las que están pegadas al terreno, pero todos podrán colaborar. Hicimos hace dos años, al principio, una consulta, y algunas entidades tenían muy claras sus áreas, y en cambio otras sabían que iban a ir a más de un ámbito.
Cuando empezamos esta iniciativa hace dos años, nos pilló el inicio de la pandemia donde todo fue muy caótico, pero lanzamos el correo pactoporlainclusion@toledo.es y todas las entidades se inscribieron. A través de ese correo, de la propia concejalía, de Andrés Martínez que es la dirección técnica de esta iniciativa… quien quiera puede adherirse. Queremos dar a otras entidades la oportunidad de que manifiesten su deseo de unirse.

¿En qué medida crees que el Pacto pone a Toledo como referente de la inclusión en España?
No puedo decir que no haya ninguna otra ciudad, pero de capitales de provincia, es la primera con un escenario de estas características. 81 entidades de nuestra ciudad más las que se van a unir, es un gran logro.

La Red de Territorios Socialmente Responsables busca consolidar un modelo social inclusivo. ¿Qué planes y objetivos tiene Toledo para la misma y qué espera de ella?
La misma línea, el objetivo es que nadie se quede atrás por una cuestión de derechos. Que todo el mundo tenga acceso a todo.

Aunque por tu experiencia profesional en el Hospital Provincial y el de Parapléjicos ya estabas habituada a vivencias dramáticas, tu debut en política en 2019 coincidió con la pandemia de Covid. Tras saltar por los aires todos los posibles planes que tuvieras para la concejalía de Servicios Sociales, ¿cómo pasaste de ser reactiva a empezar a fijar objetivos para avanzar en tu área?
Efectivamente ha sido una situación complicada, por la poca experiencia en política al venir del ámbito hospitalario, donde había experiencias dramáticas pero los objetivos solían ser mucho más a corto plazo y más fácilmente solucionables. Ahora no todo depende de nuestra voluntad sino de una serie de cosas que te ponen freno y no puedes avanzar como te gustaría. Entras con mucha ilusión, con los mismos planes que en el hospital porque al final se resume en cuidar a la ciudadanía, pero es cierto que de un día para otro se cierran todas las puertas, comercios, y te encuentras con qué hacer con las familias que ya estaban en situación de vulnerabilidad, y las que de un día para otro se ven con toda su vida cambiada, aunque jamás habían estado en servicios sociales. Hubo momentos de lágrimas, de no dormir, y preguntarme qué hago. Nunca rendirme, pero sí pensar cómo iba a ser el día a día. Afortunadamente tenía detrás el apoyo de la alcaldesa, que es una persona muy humana y una gran política y nos animó a ese ¡venga, que vamos a salir de ello! Cuando llega el otoño y las cosas empiezan a abrirse, ahí ya empezamos a ver un poquito de luz.

“Nadie se queda atrás” más que una realidad, se ha convertido en una declaración de intenciones durante la pandemia, y todas las administraciones, independientemente de su nivel o color político, han evidenciado graves deficiencias en cuanto a competencias, recursos y efectividad. ¿Cómo has vivido desde dentro este duro impacto sociosanitario? ¿Cómo crees que se debería preparar nuestra sociedad de cara al futuro?
Ahora mismo, más que recursos materiales debemos tener recursos de personal, que también depende del presupuesto. Un ayuntamiento tiene un presupuesto, al igual que un hogar, y cuando te viene una situación de estas, o una DANA o una Filomena, los recursos económicos que podíamos tener un poquito guardados han tenido que ir destinados a ello. Menuda legislatura.

La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y el ministro de la Seguridad Social, Luis Escrivá, han visitado recientemente Toledo en sendas reuniones de trabajo. Su presencia potencia y visibiliza Toledo como ciudad estratégica de cara al futuro. ¿Cómo valoras su presencia para el desarrollo de la ciudad?
Que cada vez que levantemos el teléfono para llamar al gobierno de España este acuda, y esté a nuestro lado dice mucho. Esa comunicación tan directa lo dice todo de nuestra ciudad y de la alcaldesa, la relación es buenísima y esa cercanía nos abre a muchos objetivos que se van a poder realizar porque vamos a tener esa financiación o ayuda que necesitamos. Pone en valor la ciudad de Toledo.

Estamos encarando la recta final de la legislatura. Este es el último año completo que queda antes de las elecciones, ya que el próximo deja poco margen de acción. ¿Qué objetivos tienes marcados de cara a lo que te queda?
Sobre todo, poder ayudar, que las personas tengan un bienestar en servicios sociales, que el bienestar sea real y que a pesar de las dificultades en lo que a mí concierne, pueda llegar al máximo número de personas y que su día a día sea satisfactorio.

¿Te ves otra legislatura en el Pleno si así lo deciden los toledanos y toledanas?
Después de estos dos años pienso que si supero esto que me echen lo que sea, pero lo tendrá que decidir primero la alcaldesa, si quiere que la acompañemos en este proyecto de ciudad, y segundo que la ciudadanía confíe en prorrogar este proyecto otros 4 años. Tengo mis días, pero sí, me veo con fuerza (sonríe).